domingo, 26 de noviembre de 2023

Cultura Digital

La cultura, en su sentido más amplio, es el conjunto de expresiones humanas que pueden considerarse desde distintas perspectivas, por ejemplo, las costumbres, el conocimiento, el idioma, el deporte, la música, la pintura, las normas, los valores, la religión, entre muchísimas más. La cultura evoluciona, es un ente vivo y dinámico. Puede ser estable y duradera, o volátil y efímera. En los tiempos que corren podemos decir que vivimos en la cultura digital. Hablamos de confianza digital, transformación digital, inteligencia digital, entre otras. A buena parte de las expresiones del quehacer humano de años recientes se le agrega la palabra digital. Podríamos afirmar entonces que vivimos en la cultura digital, entendiéndola como el conjunto de expresiones que manifestamos los seres humanos por medio de las tecnologías digitales.

¿Qué la caracteriza? Difícil de responder, considerando que la digitalización ha trastocado todas la áreas de la vida de las personas. Sin embargo, la cultura digital tiene elementos particulares: la omnipresencia, no conoce fronteras físicas, diluye los conceptos de local y global; la velocidad e inmediatez,  ofrece comunicación instantánea y en tiempo real; el volumen, no solo de enormes cantidades de datos que se manejan, sino también de personas que la adoptan, usan y le dan forma; es compleja e incierta, genera formidables beneficios pero colosales riesgos, en los campos de la ética, el empleo, la privacidad, la información y la formación; no descansa, no hace pausas, el consumo de contenido es continuo y creciente; hace mayor uso de los mecanismos de multimedia para manifestarse al conjugar texto, imagen, sonido, videos, entre otros.

¿Qué podemos esperar? - "El que vive de la bola de cristal pronto aprende a comer vidrio molido." - Edgar R. Fiedler – A riesgo de, al menos, un bocado, pensamos que el futuro de la cultura digital está lleno de posibilidades y desafíos: la Inteligencia Artificial (IA); la automatización; las realidades virtuales y aumentadas; la conectividad ultrasuperrápida (5G); el Blockchain y las criptomonedas; si todo debe ser sostenible, por qué no la cultura digital; la telemedicina, el teletrabajo, la teleeducación; y más adelante, la comunicación directa del cerebro humano con el mundo digital, entre muchas otras que no imagino, pero catalizadas, seguramente, por la computación cuántica. En fin, la cultura digital, resulta más que interesante, donde el protagonista es el conocimiento, las posibilidades son increíbles, y donde, como dijo el gran Alejandro Magno: “de la conducta de cada uno depende el futuro de todos”. Mantengamos la esperanza de que, entre todos, colaboremos y hagamos con la cultura digital un mundo mejor.